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Seguimos trabajando la agresividad de Duque. En esta sesión intervienen perros tutores

abril 01, 2021 // by Vivir en Manada. //


Duke, un Pit Bull de tres años que no soportaba la presencia de ningún perro. Un perro al que su genética no le permite ser feliz.

Cuando comencé con él hace apenas tres semanas, Duke era impermisivo, amenazante, agresivo nivel Dios y con muchas ganas de destrozar a cualquier perro que se le pusiese por delante.

Desde que lo conocí y en una primera sesión me hice colega de él, me dio mucha pena de verle así, ningún perro lo merece pero Duke es especial.

Especial porque con los Humanos es todo un oso amoroso y el no es culpable de que gente irresponsable haya sacado una camada de sus padres (perros de pelea).

En esta sesión, Urko vuelve a ser clave (sin despreciar ni mucho menos al resto de perros que intervinieron incluidos mis dos hembras)

Urko dio un recital en toda regla de lenguaje canino y de señales de calma, llegando a frustrar a un Duke amenazante con sus gestos (sin ruido).

El paso era ya de gigante, antes detonaba y se ponía a mil por horas. Ahora su propietaria tomaba el control del perro con semilibertad de 5m y 15m tras haber sido entrenada para ello.

Urko suelto y el resto de perros también de forma progresiva. Duke en especial tenía fijación con Urko, el cual le volvía la cara y Duke se la buscaba constantemente a medio palmo de distancia esperando un cruce de miradas para atacar...

Finalmente acaba toda la manada compuesta por 8 perros sin ningún tipo de incidente ni ademán de ataque por parte de Duke, inclusive acudiendo a la
llamada motivante de su propietaria en distancias de 15 a 30 metros.

Tan solo 24 horas después, Duke estuvo con una manada de cerca de 25 perros y aunque con algunos momentos de segundos (nada que ver con lo que era), su propietaria y el control que ha adquirido fueron claves para ir reconduciéndolo en segundos a un Duke que apuesta por su propietaria, que conecta con ella y respeta en cada momento que se le corrije, algo que antes era inexistente.

Mañana lunes salimos a la calle y cambiamos de escenario.

Duke, ya estamos saliendo de la “mierda” amigo, te prometo que vas a ser feliz, y voy a cumplirlo. Ya tienes pupilas, tus ojos no escupen sangre ni tu lomo se eriza. Eres un makina colega!

Monica, sigue así; sin tus ganas, entusiasmo, entereza y fuerza nada de esto sería posible.

Ya vamos en la recta final!