Hoy hemos solucionado un problemilla que tenia cuando se sentaba en la terraza de un bar. Se tiraba a todos los perros que pasaban... sin ni siquiera ser reactivo en su conducta.
En dos horas hemos conseguido que Boni se quede tumbado en el suelo con su correa tirada a su lado sin levantarse y permitiendo la corta distancia de otros perros que pasaban a saludarle, incluso dejándose oler.
Los primeros 15 minutos y el primer perro
que pasó, me dieron las claves para saber donde estaba la raíz del problema de Boni, y desde el segundo hasta el último perro, Boni no falló ni una.
Gracias Teresa por confiar en Vivir en Manada. La semana que viene afinaremos dos detalles para que Boni y tu estéis listos para continuar disfrutando juntos.