Al ser una perra de trabajo 100%, tenemos que sensibilizarla y adaptarla a la vida urbana, respetando su raza y el potencial que tiene para que sea la perra más feliz del mundo.
Los comandos básicos los trabaja a la perfección. Solo tenemos que afinar "el quieto", trabajar mucho su autocontrol, y la aceptación de niños.
Ha sido un gustazo este primer día con ella. Una perra muy completa que solo necesita que la afinemos.
Seguiremos dándole duro para adaptar a Pinta a su nuevo entorno. Gracias Marisa por confiar en nuestra ayuda.